La Comisión de Miami aprobó en primera lectura un proyecto de $3.6 millones para cambiar los actuales cubos azules de 18 galones por recipientes más grandes, parecidos a los de la basura. El Departamento de Desechos Sólidos también automatizará el proceso de recolección, siguiendo el mismo sistema que se utiliza actualmente para la basura. El nuevo programa, según los comisionados, ahorrará dinero a largo plazo y protegerá el medio ambiente.
El director del Departamento de Desechos Sólidos, Keith Carswell, incluyó en su nuevo plan una asignación de dinero para informar a los residentes acerca de la nueva manera de reciclar. En algunos barrios como Little Haiti y La Pequeña Habana, dijo Carswell, educar a los residentes es la parte más importante del cambio.
El comisionado Marc Sarnoff, quien representa al Distrito 2 de la ciudad, coincide con Carswell en que es indispensable educar al público y propone transmitir el mensaje de reciclaje en las escuelas públicas. “Los niños forzarán a sus padres a hacerlo,” indicó.
Sarnoff dijo también que no debe haber una disparidad socioeconómica entre los que reciclan y los que no. “No hay razón para que alguien —rico o pobre— no recicle,” dijo Sarnoff. “Sólo tienes que hacerlo muy fácil para la gente.”
Algunos críticos del nuevo plan han expresado una preocupación por la probable eliminación de posiciones en el Departamento de Desechos Sólidos. Históricamente, cada ruta de recolección de reciclables ha requerido a un chofer y a otro trabajador para recoger los cubos a mano. Con el sistema automatizado de recolección, sólo necesitarán al chofer.
Kathy Hidy, una de las residentes de North Grove que ya recicla, celebró la noticia de los recipientes más grandes por dos razones. Dijo que nunca ha tenido bastante espacio en su cubo actual y, peor, a veces ni tiene cubo.
“Están siempre robándonos los cubos,” dijo ella, riéndose. “No será tan fácil con los más grandes.” (El Nuevo Herald)
