Ha disminuido la cantidad de quiebras bancarias en Florida a medida de que las instituciones están controlando el problema de los préstamos impagos y las repercusiones de la crisis hipotecaria, dicen expertos.
Entre el primero de enero y el nueve de marzo solo dos bancos con sede en Florida aparecen en la lista de la Corporación Federal de Seguro de Deposito (FDIC).
En el 2011 se registraron 12 de esos casos y en el 2010 el total llegó a 29.
Una de las razones es que los bancos han reducido a “un nivel más manejable” sus préstamos impagos y otros bienes no productivos, dijo Karen Dorway, presidenta y directora de investigaciones en Bauer Financial, una empresa de análisis bancarios de Coral Gables.
Sin embargo, agregó, “en el sur de Florida aún hay una carga de viviendas reposeídas y eso es un lastre para la industria bancaria”.
Bauer recientemente dio la calificación de ‘recomendados’ a 26 bancos de Florida. Este es un progreso ya que en idéntica fecha del año previo solo el 18 por ciento de los bancos habían quedado en ese nivel.
Además Bauer consideró que el 37 por ciento de los bancos de Florida se encuentran en una categoría “con dificultades o con problemas”. Esta es una leve mejora ya que el año anterior ese porcentaje había llegado al 40 por ciento.
El informe destacó que la principal causa de los problemas es que muchos deudores hipotecarios no pueden pagar.
Hasta fines de febrero, las autoridades federales cerraron y vendieron dos bancos de Florida con activos por $457 millones. En igual período del año anterior fueron cerrados dos bancos, con activos por $723 millones.
“Las últimas calificaciones muestran que la mayoría de los bancos y uniones de crédito pudieron capear la tormenta financiera de los últimos años y recuperarse”, dijo Bauer.
