Los cuatro precandidatos republicanos a la presidencia de Estados Unidos se encuentran a esta hora en Jacksonville, Florida, donde hacen parte de un debate televisado.
Como primer tema de discusión, los cuatro precandidatos responden sus posturas relacionadas con la inmigración ilegal.
Durante los primeros minutos del debate, los dos favoritos, Romney y Gingrich, intercambiaron fuertes comentarios sobre sus posturas inmigratorias y sus finanzas privadas.
Antes del debate, Gingrich también puso en duda las cuentas bancarias de Romney en Suiza y las Islas Caimán.
Romney, por su parte, dijo que Gingrich era un vendedor de influencias que había ganado su fortuna como un hombre con conexiones y privilegios en Washington.
