Según “WalkScore”, una compañía privada que mide la “caminabilidad” —excusar el neologismo—de las ciudades USA, Miami es la quinta urbe más “caminable” del país, y la que ha tenido el mayor avance en ese indicador desde 2011.
Los que transitan a pie saben que hay de todo en las calles de Miami. Además del calor y la lluvia, que convierten el andar en una ardua empresa, el tráfico automotor empeoró el pasado año y es el séptimo más congestionado en USA. En muchos cruces importantes, los andarines imitan a Usain Bolt para atravesar la calle antes que aparezca la temida mano roja.
La ciudad es la octava más amigable para las bicicletas… pero las ciclovías son escasas, y los ciclistas compiten con los peatones por el espacio de las aceras en algunas localidades.
No obstante, el transporte urbano ha mejorado y las rutas de ómnibus se combinan con el Metro Raíl que circunda el centro de la ciudad para que los caminantes accedan a la periferia. Quizás sea lo fundamental que avala el ranking de WalkScore… aunque despierte dudas.
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